Juan Arcos/Darío Pale
Xalapa, Ver.- Un grupo de personas con discapacidad protestó afuera de Palacio de Gobierno para exigir apoyos a las autoridades, toda vez que también este sector se vio muy afectado por la pandemia del coronavirus.
Se trata de integrantes de la Comunidad Sorda del Estado de Veracruz, quienes fueron despedidos de sus trabajos y carecen de recursos económicos para cubrir sus necesidades básicas.
Sus familias carecen del sustento diario y, por ello, decidieron acudir al recinto del Poder Ejecutivo, en busca de ayuda.
A través de un intérprete de señas, mencionaron que difícilmente logran acceder a información sobre la contingencia sanitaria y el contagio del SARS-CoV-2.
“Ellos no saben qué está pasando en el estado de Veracruz, porque la información de Salud no es a través de su lengua materna, sino una lengua oficial, y requieren apoyos económicos por la situación difícil”.
“Hace dos meses que no tienen información sobre el Coronavirus. Hace cuatro meses que empezó y no tienen trabajo, tienen escasez económica y necesitan este apoyo”, expresó el intérprete.
Comentó que las personas con discapacidad también requieren información sobre las medidas sanitarias que deben emplear para evitar la propagación del virus.
También urgieron que se incluya el lenguaje de señas en la información sobre la enfermedad Covid-19, pues hasta ahora no se ha adecuado, por lo que prácticamente son ajenos a lo que ocurre diariamente en relación a la pandemia.
Advirtieron que la comunidad enfrenta el doble reto de sufrir una discapacidad y no saber qué está pasando, ni como atender la situación económica, “es un doble desafío que enfrenta la comunidad sorda y la comunidad con discapacidad; no es ver qué les toca, sino que es un sentido de justicia y de unidad”.
Además, externó que las madres y padres de familia de la comunidad sorda no han podido acceder a las clases en línea de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV).
Finalmente, el intérprete criticó que la información transmitida por los docentes sea únicamente oral, pues debe haber personal capacitado para dirigirse a la comunidad sorda.
