Darío Pale
Xalapa, Ver.- La conductas de los jóvenes en escuelas pueden acabar con la esperanza de Veracruz, por lo que hizo un llamado a cuidar, vigilar a jóvenes y que entre los mismos jóvenes se apoyen, así lo señaló el Arzobispo de Xalapa, Jorge Carlos Patrón Wong.
En entrevista opinó que ciertas conductas y respuestas que están teniendo los jóvenes pueden acabar con la esperanza de Veracruz, esto por lo que ha estado pasando en algunos planteles escolares con el consumo de drogas o medicamentos controlados, destacó que hoy se debe apostar todo lo bueno que la sociedad tiene, por los niños y jóvenes.
Dijo que la Iglesia Católica ante este tipo de situaciones ve una oportunidad de solidaridad y, por eso lo que el Arzobispo hace, visitando a las parroquias, a las familias, teniendo contacto con los jóvenes, es para impulsar lo bueno de cada uno y decirles que ellos pueden ayudar a otros jóvenes.
“Porque los jóvenes que estudian y trabajan, que han vencido las tentaciones, ese tipo de provocaciones que se les presentan, ellos mismos pueden ayudar a otros jóvenes para decirles cómo pueden hacer para no caer en conductas y respuestas que acaban con la esperanza de Veracruz. Hoy la gran esperanza son los niños y los jóvenes”, comentó.
El prelado católico refirió que también en las redes sociales hay contenido a favor del crecimiento humano y espiritual.
“Esa manera de impulsar lo bueno y lo positivo en los jóvenes, tenemos muy buenos jóvenes para contrarrestar situaciones muy difíciles que viven nuestros jóvenes”, señaló.
“Debemos cuidarnos, protegernos y cuidar, hay que rezar. Vigilar y rezar porque hoy no únicamente los jóvenes, sino cualquier persona aquí en México, tenemos una serie de tentaciones o provocaciones en que uno puede cometer errores que tienen consecuencias muy graves para las personas y las familias”, agregó.
Patrón Wong recalcó que las familias se deben cuidar mutuamente porque son tiempos en donde el valor de la familia y la amistad deben sobresalir.
Finalmente señaló que, “porque únicamente cuidándonos y protegiéndonos es la única manera de ayudarnos los unos a los otros. Hablamos de los adultos, de los niños, los jóvenes”.
