Opinión
MAP. Ricardo Meza Domínguez
México.- Hoy en día saber todo lo que haya que saber sobre los virus y antivirus, es probable que haya muchas curiosidades no sean tan conocidas ya que estos van evolucionando conforme se avance la tecnología:
El primer virus se encontró con el primer antivirus: Reaper: La invención del antivirus se atribuye al programador Ray Tomlinson en 1971, que ideó el programa Reaper para hacer frente al que se conoce como el primer virus informático de la historia, Esta ‘enredadera’ fue el primer programa que se había visto hasta entonces que se replicaba a sí mismo y se extendía de un nodo a otro. En este caso, su única maldad era difundir el mensaje “Soy una enredadera… ¡atrápame si tú puedes!”, pero sentó precedente.
Discos y discos: Entonces no contábamos con la facilidad y gran ventaja de la red de redes, y cualquier programa que queríamos utilizar, incluyendo estos antivirus, debía ser descargado desde una fuente externa. Los primeros antivirus comerciales llegaban a nosotros en discos floppy. Eso significaba que cualquier actualización debía
pasar este mismo proceso, con lo que muchas veces se olvidaban o se obviaban por parte de los usuarios.
No solo virus: Hoy día, esas pequeñas piezas de malware han adoptado muchas formas y variantes que, en puridad, no se denominan virus pero entran también en el mismo saco de las amenazas silenciosas a particulares: gusanos, troyanos, ransomware, spyware, herramientas para hackear, ransoms, DDoS…., son códigos maliciosos que pueden infectar nuestro ordenador. Como no es posible atacar a cada uno con una medicina propia, los antivirus genéricos que funcionan como detectores, barrera y eliminador general son la mejor solución profiláctica.
Cientos, miles, millones: Se calcula que actualmente puede haber más de 1.000 millones de piezas de malware circulando, y que cada día se detectan más de medio millón de otras nuevas. A pesar de ello, aún un cuarto de los ordenadores de todo el mundo no estaría protegido por un antivirus.
Comprobar la firma: Cualquier archivo descargado tiene una. Una forma en la que trabajan los antivirus es estando al día de las decenas de miles de códigos maliciosos que van surgiendo y comparando automáticamente esa firma con la de cualquier archivo entrante. Si hay coincidencia no le dejará pasar. Los malhechores ya saben esto, y hay maneras en las que tratan de saltarse esa protección, alterando ligeramente el código. Por eso un buen sistema también detecta firmas que ‘se parecen’ a las de los más buscados.
Antivirus al rescate: Solo un especialista (un software especialista en este caso) puede detectar archivos aparentemente inocentes antes incluso de que actúen, o incluso archivos que han estado en tu memoria durante años sin que te dieras cuenta. La mayoría hace bien su trabajo, y protege contra amenazas que provienen de la red o del email, de malware ya alojado en el ordenador o de ataques ‘zero-day’ (que aprovechan agujeros de seguridad)
Actualmente la IA en juego: La inteligencia artificial ha entrado en juego y se ha incorporado a los programas de antivirus más avanzados. Ya es capaz de aprender del comportamiento de determinados archivos para detectar si pueden ser maliciosos y bloquearlos.
“El virus de mañana es muy diferente del de hoy. Desde nuestro primer antivirus en 1998 hasta hoy, se ha seguido investigando y avanzando siempre, a la par del desarrollo tecnológico, para poder ofrecer soluciones de ciberseguridad avanzada dinámica que hagan frente a las amenazas en desarrollo y a las que surgirán”
No solo vacunas, hoy día los antivirus cubren el rango más amplio posible de amenazas y cuentan además cuentan con muchas otras funciones de seguridad, como firewalls, gestores de contraseñas, control parental o herramientas de limpieza. Estas son algunas de las funcionalidades más innovadoras a las que quizá no sabías que puedes optar:
Algunos hacen la limpieza de archivos: limpian y optimizan el PC para detectar posibles archivos durmientes y, al mismo tiempo, liberar espacio en el disco duro, lo que mejora la rapidez y el rendimiento del dispositivo.
Otros dan protección familia: Si hablamos de un ordenador doméstico y familiar, es importante limitar y regular el tiempo y el acceso a ciertos sitios de los más pequeños, así como monitorizar su actividad para poder acceder a su historial.
Sin embargo la gestión de contraseñas: Suele haber dos tipos de personas: los que ponen la misma contraseña en las distintas apps o servicios a los que acceden o los que usan una distinta cada vez (pero no pueden recordarlas). La gestión de contraseñas segura genera y almacena contraseñas seguras para que ambos puedan olvidarse de este problema.
