Alejandro Ávila
Veracruz, Ver.- La presidenta del Capítulo Veracruz de la Red Nacional de Mujeres Defensoras de la Paridad de Todos, Mónica Mendoza, lamentó que se utilice la lucha feminista para actos políticos.
En ese sentido, acusó como insensible el uso de la condición de víctima de violencia de género como una estrategia electorera; tal como sucedió en la marcha en favor de Rocío Nahle, bajo el presunto apoyo de mujeres de integrantes de colectivos feministas.
“Es absolutamente reprobable el uso político de la causa feminista para intentar victimizar a una candidata con presuntos señalamientos de discrepancia patrimonial. La violencia contra las mujeres que tiene a la entidad en los primeros lugares nacionales de feminicidio, de desapariciones de mujeres y niñas, y de violencia política hacen que sea sumamente irresponsable y muy poco sensible pretender adjudicarse la condición de víctima como estrategia electoral”, dijo.
Resaltó que las activistas feministas y las colectivas en Veracruz, son las que han hecho frente a la contención de la violencia contra las mujeres ante la ausencia de una política pública por parte de las autoridades estatales.
Al tiempo, dijo que, como expertas en el tema, las activistas consideran que no hay configuración de violencia de género al señalar su lugar de nacimiento y discrepancia patrimonial.
“Los señalamientos que se han hecho en su contra por discrepancias patrimoniales respecto de sus declaraciones que no coinciden con los bienes que se le han adjudicado y los relativos a su origen situado en el estado de Zacatecas no constituyen violencia de género alguno”.
Finalmente, agregó que al movilizar a las mujeres para dicha marcha, fue un acto político y no una marcha feminista.
“Esa marcha ni fue ciudadana, ni fue espontánea, hay un amplío registro fotográfico que da cuenta del acarreo en camiones de las mujeres que fueron llevadas incluso desde zonas indígenas para participar en esta marcha y a las cuales se les entregaron playeras que fueron trasportadas en pacas en las bateas de varias camionetas que tenían la leyenda de ‘Rocío no estás sola’, lo que pone de manifiesto que no fue una marcha de mujeres, sino un mitin proselitista”, finalizó.