OPINIÓN

HAY COSAS PADRÍSIMAS Y HAY COSAS MADRÍSIMAS: MÓNICA MAYER

Sergio Armin Vásquez Muñoz

El feminismo no es siempre el sinónimo de violencia y destrucción que cada ocho de marzo nos muestran los medios de comunicación y las redes sociales. Hay un feminismo creativo, de vigencia permanente, que denuncia y levanta la voz a partir de propuestas estéticas. Ése es el feminismo que representa Mónica Mayer, artista plástica nacida en la Ciudad de México, en 1954.

Mónica Mayer estudió artes visuales en la Escuela Nacional de Artes Plásticas de la UNAM y cuenta con la maestría en Sociología del Arte por la Goddard College, de los Ángeles, California, lugar donde también tuvo participación dentro del Feminist Studio Workshop. Su obra, tanto su trabajo gráfico, sus dibujos y sus performances, se han presentado, desde 1970, en espacios independientes y oficiales, a nivel nacional e internacional. Es considerada una pionera del performance y la gráfica digital en México. Igualmente es precursora del arte feminista en América Latina. 

En cuanto a referencias de su trayectoria, tenemos, por ejemplo, que en el año de 1983 fundó con Maris Bustamante (también artista visual) el grupo de arte feminista “Polvo de Gallina Negra”, primero en su tipo en México y cuya documentación se ha presentado en distintos foros, incluyendo el Museo Reina Sofía, en España.

Más tarde, en 1989, fundó con Víctor Lerma (su esposo) el proyecto “Pinto mi Raya”, basado en arte conceptual aplicado, en el que han desarrollado propuestas en torno al sistema artístico. Pinto mi Raya ha sido una galería, una serie de televisión para el Canal 23, un programa de radio, una de las primeras revistas virtuales de arte contemporáneo mexicano, un libro, un blog, un proyecto de edición de gráfica digital, una serie de performances, pero principalmente un proyecto de investigación basado en su archivo hemerográfico especializado en arte contemporáneo mexicano, que a la fecha incluye más de 200 mil artículos.

Otro de sus proyectos, acaso el más reciente como propuesta integral, es el denominado “Hija de su madre”, una exposición que reúne más de cien trabajos, algunos propios y otros de artistas con propuestas parecidas, organizada en tres ejes temáticos: PRIMEROS VÍNCULOS, ROMPER EL MITO DE LA FAMILIA Y DE-GENERACIONES, que cuenta en su conjunto con material fotográfico, de archivo, documental, performance, entre otros recursos.

En el caso de PRIMEROS VÍNCULOS es una muestra que explora “las reflexiones de Mayer sobre ser hija de su madre… y de su padre, hermana, madre y esposa, lazos frecuentemente atravesados por el afecto, la memoria, la violencia y la muerte, como el suicidio de su madre, Lilia”.

En lo que se refiere a la segunda parte, denominada ROMPER EL MITO DE LA FAMILIA, se “agrupa la obra en la que Mayer cuestiona los mecanismos que construyen a la familia y cómo ésta es atravesada por estructuras jerárquicas y definida por las relaciones heteropatriarcales”.

La última muestra, identificada como “DE-GENERACIONES”, “conjunta los trabajos de la artista cuya temática es el envejecimiento, la enfermedad, el duelo y la muerte en diferentes escenarios, como las pandemias, el suicidio o la vejez, estableciendo una conversación sobre las genealogías, los ciclos de vida y muerte, así como el relevo e intercambio generacional dentro de las familias”.

Y todo este conjunto de propuestas, inscritas en la muestra “Hija de su Madre” de Mónica Mayer, están expuestas desde el jueves 4 de julio y lo estarán hasta el domingo 6 de octubre de 2024, en las instalaciones de la Galería de Arte Contemporáneo de Xalapa (Xalapeños Ilustres 135, Zona Centro), esperando a ser apreciadas o sufridas, admiradas o adjetivadas, o simplemente a ser detonantes de razonamientos desde el contexto de cada mirada que tenga oportunidad de apreciar este trabajo creativo.

Por lo pronto, en lo personal, me quedo con las reflexiones que la propia artista compartió a quienes tuvimos oportunidad de saludarla en el acto de inauguración de esta muestra: “la vida y el arte son lo mismo” y “lo personal es político”. Y si alguien lo duda, puede darse una vuelta por los pasillos de la exposición. Seguramente encontrará algunas otras reflexiones envueltas en papel.

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