Darío Pale
Xalapa, Ver.- Más de medio millón de credenciales del Instituto Nacional Electoral (INE) serían dados de baja del padrón electoral de Veracruz sino se actualizan al 31 de diciembre de este año, así lo informó el vocal del Registro Federal de Electores (RFE), Sergio Vera Olvera.
En entrevista, explicó que las credenciales para votar, con base en los convenios que el INE tiene, son de una vigencia de 10 años, sin embargo, en esos 10 años la gente cambia en su fisonomía, por lo que se debe actualizar la credencial.
Comentó que ello trae como consecuencia que haya credenciales que se deben renovar y recordó que el Consejo General del INE amplió la vigencia para las credenciales que tenían vigencia al 2023 para que pudieran votar en el pasado proceso electoral concurrente.
Una vez pasada la jornada electoral, el 3 de junio fueron dadas de baja 111 mil credenciales de elector, por lo que ya se afectó el padrón electoral.
“Pero tenemos el gran problema de que en el estado de Veracruz tenemos elecciones locales y estaremos dando de baja casi a medio millón de credenciales sino son actualizadas por sus titulares, pero eso el llamado a los ciudadanos para hacer conciencia de que nuestras credenciales tienen una vigencia de 10 años”, señaló.
Vera Olvera comentó que se han hecho notificaciones hasta en 4 ocasiones, pero no ha habido una respuesta adecuada.
Aclaró que la vigencia del documento oficial no es del momento en el que acuden al módulo del órgano electoral federal, por lo que todas aquellas que tienen más de 10 años causarán baja el 31 de diciembre.
Por lo que recomendó revisar la vigencia que viene en la parte inferior de la credencial, asimismo, dijo que aunque no tengan los 10 años, pero sean credenciales deterioradas, vayan al módulo.
El vocal del Registro destacó que derivado de la baja de las más de 111 mil credenciales se afectó la lista nominal y de tener más de 6 millones en el pasado proceso electoral del 2 de junio, ya está en 5 millones 900 mil.
Finalmente Vera Olvera aseguró que el instituto tiene la capacidad de actualizar a ese medio millón de credenciales que se darán de baja, pero el problema es que no hay el interés de los ciudadanos de hacerlo sino hasta que se dan cuenta de que su documento ya no es válido en las instituciones bancarias.