Darío Pale
Xalapa, Ver.- El Presidente municipal de Xalapa, Ricardo Ahued Bardahuil dio a conocer que desde la Secretaría de Gobierno será plural e institucional; “el respeto a la libertad de creencias religiosas es por derecho”.
En entrevista comentó que en el pleno respeto a la libertad de creencias religiosas y de culto en la próxima administración de la Secretaría de Gobierno (SEGOB), prevalecerá el diálogo y la cercanía en los trabajos que corresponderá a la Dirección de Asuntos Religiosos.
En ese sentido, refirió que la reunión que se llevó a cabo en días pasados entre la gobernadora electa Rocío Nahle García y el arzobispo de Xalapa Jorge Carlos Patrón Wong fue cordial e institucional.
“Platicaron muy amenamente, el desayuno era de una hora y se extendió a dos y media (…); hubo institucionalidad, que es lo que se requiere. Todas las organizaciones de culto se van a atender con todo el respeto”, señaló.
Dio a conocer que, se espera próximamente que también se realicé algún encuentro con la comunidad evangélica veracruzana.
“Sin inmiscuirnos en temas que son particulares de cada quien (…). En la Secretaría de Gobierno hay un espacio donde se tiene que atender en abierto a todas y todos, entonces lo señal que se ve (con dicha reunión) es que vamos con toda la pluralidad; como debe de ser”, comentó.
Ricardo Ahued acudió a dicho encuentro acompañando a quien dirigirá el Poder Ejecutivo durante el próximo sexenio a partir del 1 de diciembre.
De tal forma, destacó que los vínculos institucionales desde estos sectores y el Estado, “son temas que por ley se deben atender, están en todo su derecho y así serán atendidos”.
Y es que algunos de los objetivos de esta área consisten en desarrollar la interlocución del Poder Ejecutivo con las instituciones religiosas, mediante el impulso al diálogo permanente y fluido con los actores religiosos.
Finalmente dijo que, además de garantizar el ejercicio de la libertad religiosa mediante la atención oportuna de los servicios gestionados por las asociaciones religiosas, así como resolver los conflictos de intolerancia religiosa suscitados en el país mediante la intervención concertada y el fomento de los valores de la tolerancia.