Los Políticos
Salvador Muñoz
Con la ausencia del PT de la coalición Sigamos Haciendo Historia, aunque todavía tiene chance de que se le baje el berrinche de aquí al dos de febrero para unirse, el escenario en este momento, es una abanico de circunstancias para todos y para ninguno…
Empecemos con el berrinchudo PT… En el caso de que llegue el dos de febrero y siga montado en su macho, habría que acudir a la especie de que el Clan Yunes entraría con ellos al quite.
Si fuera así, la elección del primero de junio daría también oportunidad de conocer el tamaño real del Clan Yunes, y no sólo en la zona conurbada, sino en todo el estado.
El primer afectado –hemos de suponer– sería el PAN si –volvemos a suponer– los yunistas azules jalan con la estrella amarilla. Siendo optimistas los panistas, la opción sería que su merma fuera sólo en militancia, en espera de que el desaguisado que ocasionaron los Yunes con el famoso voto 86 en el Senado, beneficie de cierto modo al PAN como víctima y repercuta en el PT en la alianza con el Clan del Estero.
Si bien, al ir solo el PT en estas elecciones (si es que su berrinche no baja el dos de febrero) abre también la oportunidad a la militancia de la estrella amarilla para realizar por fin su sueño de ser candidato o candidata por su municipio, aunque también abre un huequito a los yunistas para ocupar ese lugar que pudiera ser para un militante petista.
Si el PT hace efectiva su alianza con el Clan Yunes, la consigna entonces en Morena no sólo incluiría el carro completo, sino destruir al amigo de tu enemigo…
Ahora que si el Clan Yunes sencillamente no participa, se hace a un lado, y el PT va solo en los 212 municipios, quizás entonces estaríamos en la antesala de tener a un partido menos en nuestra entidad.
En el caso del PVEM, ya con la ausencia del PT de la mesa, mal haría si no reclama, demanda o pide para sí los municipios que dejó su ex aliado (al menos en este momento), con un objetivo claro: no sólo incrementar o multiplicar el número de ayuntamientos, sino convertirse en una segunda fuerza real electoral en el estado, sí, por encima del PAN y de un modo u otro, alejarse de Movimiento Ciudadano.
Si bien Movimiento Ciudadano presume ya tener en la bolsa a la mayor parte de sus candidatos con todo y planilla, bien puede convertirse en receptor ya no sólo de priístas, sino también de alguno que otro petista bajo la promesa del 2027…
En el caso del PRI, ni le beneficia ni le perjudica que el PT esté fuera de “Sigamos Haciendo Historia”… quizás sea en estos momentos el rival más débil de la contienda… aunque si Morena se lo propone, puede que el PT lo acompañe si es que de aquí al dos de febrero decide no departir el atole ni los tamales con Morena ni con el Verde.
