Juan Arcos
Xalapa, Ver.- Pobladores del municipio de Ixhuacán de los Reyes protestaron y lograron la suspensión temporal de la obra para la introducción de drenaje sanitario en la localidad Amatla, una zona donde se había denunciado la contaminación de manantiales.
Los habitantes de distintas comunidades, como Barranca Grande y Barranca Nueva, se manifestaron luego de que el alcalde Fortunato Ruiz Vargas aprobara una obra de drenaje que contaminaba los manantiales que abastecen a familias de la parte baja del municipio.
Las descargas de aguas negras podrían desembocar en el río La Antigua, desatándose un problema aún mayor en la región capital del estado de Veracruz.
Diversas organizaciones ambientalistas y los mismos pobladores indicaron que el problema con la obra radica en el hecho de que la autoridad municipal pretende establecer la salida del drenaje en un terreno que se ubica en los márgenes del río Ixhuacán, en donde se perforarían pozos y fosas sépticas.
Uno de los riesgos asociados con este tipo de medidas es que pueden causar derrames, por la voluminosidad de las aguas residuales o por las lluvias y con ello desencadenar enfermedades que pueden poner en peligro la salud de los habitantes y al mismo tiempo, causar afectaciones al medio ambiente.
“En especial debido a que la comunidad Barranca Grande se ubica cuenca abajo, por lo que, en caso de ocurrir algún derrame, las aguas residuales bajarán hasta llegar a los cuerpos de agua que sirven de abasto para la comunidad”, enfatizaron.
Indicaron que, a través de solicitudes de acceso a la información, se tuvo conocimiento de que el ayuntamiento inició la obra sin notificación previa a la Secretaría de Medio Ambiente del Estado de Veracruz, para que resolviera si debe o no presentar una manifestación de impacto ambiental, en términos de los artículos 6 y 7 del Reglamento en Materia de Impacto Ambiental de la Ley de Protección Ambiental del Estado de Veracruz.
La decisión de ejecutar esta obra se dio sin que se consultara a los habitantes de la comunidad Barranca Grande, a pesar de los daños que ya se están generando y que de continuar avanzando, se van acumulando como impactos adversos a los ecosistemas, sobre todo a los ríos y manantiales que sirven de abasto para dicha comunidad.
“Es importante mencionar que los daños que se ocasionen al Río Ixhuacán afectarán a lo largo de toda la cuenca de La Antigua, por lo cual es necesario llevar a cabo acciones para su protección. Proteger los ríos y manantiales de Barranca Grande, es proteger la cuenca misma”, enfatizaron.
El pasado 29 de noviembre, habitantes de la comunidad Barranca Grande presentaron denuncias populares ante diversas autoridades: Comisión Nacional del Agua (Conagua), Comisión del Agua del Estado de Veracruz (Caev), Secretaría de Medio Ambiente del Estado de Veracruz (Sedema) y la Procuraduría Estatal de Medio Ambiente (PMA).
Los pobladores lograron que el gobierno municipal suspendiera temporalmente los trabajos para la introducción del drenaje sanitario, hasta que haya un acuerdo definitivo con las comunidades.
A la defensa de los manantiales se sumaron diversas organizaciones, como Pueblos Unidos de la Cuenca Antigua por los Ríos Libres; la Red de Custodi@s del Área Natural Protegida Archipiélago de Bosques y Selvas de Xalapa; el Centro Mexicano de Derecho Ambiental y Espora Media, por mencionar algunas.
