Juan Arcos
Xalapa, Ver.- Un pequeño grupo de ciudadanas y ciudadanos protestó frente a Palacio de Gobierno, en la zona centro de esta ciudad de Xalapa, para exigir la liberación de los militares que fueron detenidos y vinculados a proceso tras la muerte de cinco jóvenes en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Las personas se plantaron sobre la escalinata de la Catedral Metropolitana de Xalapa con banderas mexicanas, pancartas y lonas, donde se leían diversos mensajes como: “mi total apoyo al Ejército Mexicano” y “fuimos creados para vencer y no para ser vencidos”.
Los quejosos también se concentraron sobre el parque Benito Juárez, a un costado del Palacio de Gobierno, para exhibir la situación a la población xalapeña y solicitar a más personas a que se sumaran al movimiento, pues se convocó a esta manifestación a nivel nacional.
Mencionaron de manera anónima por cuestiones de seguridad que la protesta es para apoyar a los militares, quienes, a su juicio, además de apoyar en labores de seguridad nacional también participan en acciones humanitarias en caso de desastres naturales.
“Estamos aquí concentrados en esta plaza, estamos en apoyo a nuestros hermanos del Ejército Mexicano, pueden ver en los medios de comunicación el problema que tuvieron en Nuevo Laredo, pero se da en todas partes de nuestro país”, enfatizaron.
El conflicto con los militares ocurrió el pasado 26 de febrero en la colonia Manuel Cavazos Lerma, al norte del país, donde los pobladores agredieron a los elementos, bajo el argumento de que los cinco jóvenes eran inocentes.
Una de las versiones que ha circulado sobre este caso es que los abatidos presuntamente pertenecían a una banda delictiva y que los militares repelieron una agresión con arma de fuego.
Los elementos del Ejército Mexicano están siendo investigados y fueron ingresados a la prisión del Campo Militar 1-A, aledaño a la sede de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en el Estado de México.
El reporte militar señala haber visto una camioneta con las luces apagadas y, al marcarles el alto, aceleraron, después de esto se escuchó un estallido fuerte, una presunta detonación de arma de fuego, por lo que los oficiales reaccionaron.
Ahora los militares están detenidos por desobediencia, pues presuntamente dispararon contra los cinco jóvenes sin orden ejecutora. Los civiles habían salido de un antro y se dirigían a sus casas.