Darío Pale
Xalapa, Ver.- La Fiscalía General del Estado (FGE) no probó enriquecimiento ilícito de Deantes, si se hubiera querido fugar se hubiera fugado hace seis años, apelarán sentencia, así lo aseguró su abogado Rodolfo de la Guardia García.
La Fiscalía General del Estado no probó el delito de enriquecimiento ilícito en contra de Gabriel Deantes Ramos, exsecretario del Trabajo en la administración de Javier Duarte, si se hubiera querido fugar, lo hubiera hecho hace seis años.
En entrevista explicó que los peritos de la institución no fueron capaces de producir información eficaz y contundente en el tribunal de enjuiciamiento.
Explicó que como se había dictado la sentencia condenatoria de seis años y seis meses había riesgo de fuga.
“Y eso es falso. Gabriel ha estado sujeto a este proceso durante siete años y ha venido a firmar de manera rigurosa, semanal, quincenal, mensual”, señaló.
El Abogado refirió que la Suprema Corte ha definido que la presunción de inocencia no se derrota con una sentencia condenatoria.
“Y pensar que Gabriel Deantes se iba a fugar por escuchar la sentencia, hombre Gabriel se hubiera fugado hace seis años si se hubiera querido fugar”, manifestó.
De la Guardia informó que el Ministerio Público reconoció que el incremento del patrimonio de Deantes es consecuencia de unos traspasos que le hizo su padre antes de morir.
“Lo dijo el Ministerio Público y lo dijeron los contadores, así lo dijeron, que eran traspasos de su padre y le preguntamos a los peritos que esos traspasos no pueden ser un incremento porque vienen de su padre”, comentó.
“Pero la Corte ha dicho que el enriquecimiento ilícito tiene que probarse con la ilicitud que ustedes y yo nos enriquecemos cuando trabajamos como conducta”, agregó.
Tras la sentencia emitida la noche de este jueves 15 de junio, el Abogado informó que procederán a solicitar un amparo indirecto en contra del cambio de la medida cautelar porque venía firmando.
Por último en ese sentido, expresó que con dignidad, el exfuncionario respondió que no se fugaría y que por ello se ponía a disposición del director del reclusorio de Pacho Viejo.