Los Políticos
Salvador Muñoz
Una pregunta hicieron con respecto a las tres damas y el varón que cité en pasada columna como potenciales precandidatos de Morena en pos de la presidencia municipal: ¿Y Cinthya Lobato?
Una observación hicieron con respecto a mi propuesta de que fuera Ricardo Ahued el candidato, bajo la idea de que sólo él podría mantener para Morena, la presidencia municipal de la capital del Estado: El empresario del plástico no iría pero apoyaría a Ernesto Pérez Astorga o Toño Ballesteros…
Si usted se sorprendió con la mención de Cinthya entre los precandidatos de Morena, igual yo me quedé ¡de a seis! ¿No se supone que Lobato tiene “su” partido ciudadano y que si en un momento dado, fuera postulada como candidata, tendría que ser por Unidad Ciudadana? Hay que recordar que los nuevos partidos en su primera participación en una elección, se tienen que rascar con sus propias uñas, es decir, tienen que ir solos, sin alianzas… entonces, ¿dónde entra Morena? –pregunté a mi interlocutor y me respondió lo siguiente– si bien, Morena no la contempla, sí Ricardo Monreal… ¡De ese tamaño!
En el caso de Pérez Astorga y Toño Ballesteros, quienes consideran que serán las cartas de Ahued es porque creen que el Senador no aplicaría la de Chiquinando, es decir, saltar del Senado a la Alcaldía… cuestión de enfoques… aunque con respeto a ambas “cartas”, mi voto no sería para ninguno de éstos…
Pero hubo otros enfoques a raíz de esa columna… Ahora, en Morena, se tiene contemplado la cuestión de género y hay quienes están echando la carne al asador por Rosalinda Galindo si la balanza se inclina por una mujer; o si es varón, ni Ahued, ni Pérez ni Ballesteros… ¡el bueno sería Eleazar Guerrero! El candidato o la candidata sería de Morena-Verde…
En el caso del PAN, al igual que el PRI y PRD, se disputan a David Velasco Chedraui aunque el empresario se mantiene al margen de las grillas políticas para meterse de lleno al diálogo y proyección de ideas con empresarios, para que de un modo u otro, alivianen en estos momentos de incertidumbre en inversiones, empleos y economía… mientras, ni pío dice…
Hay quienes consideran también que podría volver al escenario político el famoso Pipo Vázquez, sí, igual, por el nuevo PES (Partido Encuentro Solidario)… no hay que olvidar que los Vázquez pusieron su granito de arena para apoyar a Cuic aunque creo que los batearon y feo… Pipo fue el candidato a Gobernador allá en el 2016 por el PES (cuando era Encuentro Social)… ahora sería por la alcaldía xalapeña…. ¿Américo por Podemos? Sinceramente no creo… imaginen que de delegado del PRI en la tierra del camote pasara a la del chile xalapeño como candidato con otro partido que no es el de sus amores?
En fin, falta mucho trecho que caminar y quién fuera a decir… de cuatro precandidatos que se pensaban para Morena en la capital veracruzana, aparecieron 3 más… bueno, Pérez Astorga y Ballesteros por Morena, y Cinthya con Monreal con Unidad Ciudadana…
¡Gladys no se raja!
“En ningún momento he declinado a mi derecho de obtener la ratificación a mi nombramiento como Magistrada del Poder Judicial del Estado (PJE)”, comentó a reporteros la Magistrada del Poder Judicial del estado de Veracruz, Gladys Pérez Maldonado, después de que el pasado 29 de junio, en portal Vanguardia, la reportera Ada Reyes diera a conocer que el Consejo de la Judicatura del Poder Judicial de Veracruz dejaba fuera a los magistrados Fernando Charleston y Gladys Pérez Maldonado, “ya que no serán ratificados en el cargo. Fue hace unos días cuando el Consejo sesionó y determinó dejarlos fuera, pese a que podrían estar en el cargo por un periodo de 10 años”.
El 29 de enero, precisa la magistrada Gladys Pérez Maldonado, solicitó al Consejo de la Judicatura de la entidad, “se iniciara el procedimiento de ratificación de su nombramiento como Magistrada del Poder Judicial del Estado de Veracruz, conforme lo previsto en la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado, en el Capítulo VIII, de los artículos 209 al 213, estableciéndose un periodo no mayor a seis meses previo a la conclusión del cargo de diez años para el que fue nombrado el magistrado, para que el Consejo de la Judicatura analice su situación y desempeño, emitiendo como resultado un dictamen técnico, favorable o no favorable, respecto de su ratificación”. ¡Servida!
